Cómo se vive el festival desde dentro, siendo parte del jurado del premio del público, y lo que dio de sí.
JIA ZHANGKE y SU RELACIÓN CON PINGYAO
Jia Zhangke 贾樟柯 es, con permiso de Zhang Yimou, el director más popular y mediático de China. Reconocido como el líder de la 6 generación de directores del país, Jia Zhangke continúa siendo una figura influyente en la industria. Su prolífica carrera abarca la dirección, producción, actuación, creación literaria e incluso la dirección de un festival de cine cuya más reciente 8ª edición ha tenido lugar en Pingyao del 24 al 30 de septiembre.
Un festival nacido «pequeño» y con el objetivo de ayudar e impulsar a los jóvenes realizadores chinos y también extranjeros. Solamente entran en concurso directores noveles que, o bien, presentan su ópera prima o hasta su tercera película.
La cuidad donde se celebra es Pingyao 平遥 (Shaanxi), patrimonio de la humanidad de la UNESCO situada muy cerca de la ciudad de donde es originario Jia Zhangke, Fengyang. El Festival internacional de cine Pingyao (PYIFF ) tiene lugar en lo que llaman el «Palacio», un espacio inmenso remodelado a partir de una fábrica de motores diésel que estaba abandonada y que se encuentra dentro de la ciudad amurallada de Pingyao.
Esta 8ª edición del festival se celebra por primera vez en septiembre, moviéndose de su fecha habitual en octubre para sacarle más partido al inmenso cine al aire libre, llamado «Platform» 站台 como la película del director del 2000. Así, en el exterior, se han podido programar hasta dos sesiones diarias, una a las 19h y otra alrededor de 22h sin que el frío estropeara las proyecciones, aunque el último día, por causa de la lluvia se cancelara una sesión.
JURADOS
El año pasado ya estuve en el festival, pero volver para formar parte del jurado del público es otra cosa. Más de una semana en la que todo es cine y más cine. Es increíble cómo pasan los días de rápido, donde toda preocupación es consultar a qué hora tienes la siguiente película.
Los 45 elegidos para formar parte del jurado del premio del público del festival hemos sido convocados un día antes de que este de comienzo, para poder dividirnos en 3 grupos. A cada grupo le tocará una sección, mi favorita es «Hidden Dragon» 藏龙 que contiene las películas en lengua china.
El festival, también denominado Crouching Tiger, Hidden Dragon, en honor a la película de Ang Lee (Tigre y dragón) da nombre a las dos grandes secciones que otorgan los premios Roberto Rossellini y Fei Mu (Primavera en un pueblo pequeño)
Por orden, cada miembro del jurado coge una papeleta del sorteo y se presenta a los demás. Me toca la sección «Premier» 首映, o sea, la que menos me apetecía. Son todo películas extranjeras que han participado este año en festivales o, que por alguna razón, han sido escogidas para estar presentes aquí.
Si bien la sección Tigre y la sección Dragón tienen cada una 13 películas, la sección Premier contiene «solamente» 9 películas. Yo ya tenía dos entradas de esta sección, entre ellas la de la última de Jonás Trueba «Volveréis», que ya no voy a necesitar así que, me tocará, vender o cambiarlas para poder aprovechar al máximo mi estancia.
Menos mal que sé, por experiencia, que no es difícil, una vez en el festival, conseguir entrar en grupos de Wechat donde la gente solicita e intercambia entradas.
El año pasado ya contaba lo difícil que es hacerse con una entrada. Este año, la web vuelve a colapsar el día que se abre la plataforma para comprar los codiciados tickets. Si estás en Pingyao y no tienes entradas es muy probable que, a ultimísima hora, desde su web, se pongan en venta algunas que, por lo que sea, han quedado libres. El precio 80 yuanes (algo más de 10€).
Todo está muy bien organizado. Cada día, en nuestro grupo de jueces de Wechat, nos recuerdan el lugar y la hora donde nos encontraremos a pie de cine para darnos, previa firma de asistencia, las entradas.
Las voluntarias, bien identificadas con su jersey azul, son amabilísimas. El último día me enteraré de que una de ellas estudia español en la universidad, pero por vergüenza, no me dijo nada.
Mis compañeros, sean o no de mi sección, están muy pendientes de mí. Me saludan por la calle si me ven y me ayudan con las traducciones siempre que es necesario. Después de cada película, con simples gestos nos vamos comentando qué sensación hemos tenido, «five stars, five stars» me han llegado a decir de alguna que luego se ha quedado por el camino.
JIA ZHANGKE DESDE EL DÍA 1
Es facilísimo ver al director por el festival. Acude a las fiestas, estrenos, presentaciones, charlas…la verdad que tiene que ser para él agotador, pero siempre parece tranquilo y relajado. Va siempre vestido de negro, con un pin del festival en la solapa y deportivas.
El primer día, en la primera sesión, me encuentro con Jia Zhangke casi de bruces. Ha ido a presentar la película, Crossing Years 过年, un documental de un director afincado en Hong Kong, que pensaba que desconocía, y que presenta y hace un homenaje a un artista multifacético desde la amistad.
A Yang Fan 杨凡, lo conocía por su película animada, No.7 Cherry Lane 继园台七号 que estuvo en 2019 en Venecia, pero en ese momento no había caído.
Un día me lo encuentro paseando por Pingyao. Va comiendo dulces hechos con frutos secos. Le sonrío. Se detiene. Hablamos y nos hacemos una foto. También me regala uno de sus dulces.
LINA WANG 王丽娜
La primera obra de esta directora A first Farewell (2018) 第一次的离别, me maravilló. Ambientada en la zona de Xinjiang, de donde Lina Wang es originaria, y a través de la vida de unos niños, nos hace un retrato casi documental de cómo y cuáles son las preocupaciones de la gente que vive ahí.
Tras la proyección de su segunda película Village Music (2024) 村庄·音乐 intento acercarme a ella, pero es imposible. El destino hace que al rato, cuando estoy comiendo en un restaurante, entre ella con todo el elenco de su película. La miro, la saludo y le digo que acabo de ver Village Music y que me gustó mucho. Ella se levanta y viene hacia mí. Hablamos, le comento que su primera película me impactó aún más y me abraza, sí me abraza.
Me parece una mujer fantástica, con una sensibilidad que transfiere a su cine. Me cuenta que le habían invitado para ir a Valencia a presentar esta cinta, pero que le coincidía con Pingyao y que por eso no ha ido a España, pero que le encantaría visitarla. Ojalá lo haga pronto.
OTRAS PELÍCULAS
La película de apertura del festival es A River Without Tears 怒江, la segunda creación de la cineasta Liu Juan 刘娟,
Ha tardado más de una década en llevarla a la pantalla tras Singing When We’re Young 初恋未满 , que se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Shanghai en 2013 y que ganó el premio del jurado.
“Me llevó mucho tiempo hacer esta película porque quería tener altos valores de producción y mi propia voz, lo que puede ser difícil para un director nuevo”, afirmó la directora en una entrevista en Screendaily que ha contado con la ayuda de Jia Zhangke como productor y que a todos nos defrauda un poco. Un drama ambientado en la frontera entre China y Myanmar, en el que un padre busca la verdad tras la muerte de su hija. Un tema que últimamente está siendo muy recurrente en el cine de este país, hay varias películas con este mismo argumento.
Otra mujer que está en Pingyao es la periodista japonesa Shiori Ito. Ella documenta el proceso sufrido tras denunciar una violación sexual por parte de un superior, con su película Black Box Diaries (2024), que también se pudo ver en Sundance. Muy interesante la ovación final al documental y el breve encuentro del director con el público en el que, sobre todo se agradeció, este tipo de voces en una sociedad tan patriarcal. Una de las mejores películas que he visto en el festival.
Walter Salles, amigo personal de Jia Zhangke, no acude en persona, pero presenta su última obra en la sección «sorpresa» (que son películas que se anuncian casi a las puertas del empiece del festival).
I’m Still Here (2024), cuenta el director en la presentación grabada, que es un gran trabajo documental que ha realizado de las memorias de Marcelo Rubens Paiva, pero también basado en sus propios recuerdos de esa época.
Presentada en Venecia donde se llevó el premio al guion, cuenta la historia de los años turbulentos de Brasil, donde un padre de familia desaparece tras ser detenido y la lucha que hace la esposa por destapar la verdad.
PELICULAS GANADORAS
Los premios Fei Mu 费穆 en honor al director de “Primavera en pueblo pequeño” (1948) 小城之春 la que dicen es la «mejor película del cine chino” este año han recaído en el drama Karst de Yang Suiyi para la mejor película. La historia de un criador de ganado que viaja a un pueblo cercano para buscar tratamiento para sus animales mientras se va llenando de recuerdos.
El joven Tang Yongkang como mejor director por Stars and Moon y el premio del jurado para la cinta china Green Wave de Xu Lei, un drama padre-hijo.
En los premios Roberto Rossellini, de la sección Hidden Tiger, el drama familiar suizo de Ramon Zurcher
The Sparrow In The Chimney se llevó el premio a la mejor película, esta se estrenó el mes pasado en Locarno y sigue a miembros de una familia que se preparan para una fiesta de cumpleaños mientras salen a la superficie viejos traumas.
El de mejor director se lo llevó el francés Boris Lojkine por The Story Of Souleymane , que consiguió el premio del jurado de Un Certain Regard este año en Cannes, y Happyend de Neo Sora, el hijo de Ryuichi Sakamoto, que se lleva el premio del jurado.
EL PÚBLICO
El público de este festival es extremadamente joven. Es verdad que en China, este es el público que más se ve en los eventos culturales, pero aquí es más llamativo.
Empezando por los voluntarios, 150 jóvenes fácilmente reconocibles por su camiseta azul, que son sumamente abiertos y diligentes.
Como sucede en todos los festivales de cine, la oportunidad de poder encontrarse con las estrellas de la pantalla durante la estancia, es uno de los mayores atractivos. Pingyao, a diferencia de otras grandes ciudades como Shanghái y Pekín, es un festival más «pequeño». Este alberga unas 50 películas, a diferencia de las 300 o 400 películas que se puedan ver en otros grandes festivales. Lo bueno es que, al ser tan familiar y más recogido, no es difícil poder ver a las estrellas que acuden.
Este año repite el actor Wang Junkai 王俊凯, ídolo musical que está destacando en la interpretación con sus últimos trabajos y que mueve miles de fans. También estuvo Rong Zishang 荣梓杉, otro joven actor que empezó precisamente con Jia Zhangke en su película Más allá de las montañas (2015); el actor y director Da Peng 大鹏, igual menos conocido para el público internacional pero que cuenta con una inmensa carrera en el país. El director Chen Kaige 陈凯歌, pasó por el festival para recibir un premio y celebrar la conmemoración del 40º aniversario de su película Tierra amarilla 黄土地 que se pudo ver en una versión restaurada.
ESPACIOS
Además de los dos cines grandes, el gran cine al aire libre «Platform» y el cine «Primavera en un pueblo pequeño», hay otras 4 salas ligeramente más pequeñas que componen los 2.200 asientos que tiene el festival. Por esto, también es tan difícil hacerse con una entrada y por esto, también el festival decimos que es «pequeño».
Además de las cafeterías, hay otro espacio que merece la pena nombrar, la librería. Ubicada encima de las salas de cine, este gran espacio podría pasar desapercibido. Una gran librería con literatura dedicada por entero al mundo cinematográfico. Es una delicia estar ahí y revisar todos los títulos, haciéndose una idea de lo que hay traducido al chino, novedades y grandes éxitos.
Antes de entrar a la librería, encuentras otro pequeño espacio que hace las veces de sala de exposición. En esta ocasión son fotos con prendas de ropa que componen la exposición «Tejiendo sombras de memoria»
Una colaboración con una plataforma de moda sostenible canU que ha elegido nombres muy cercanos a la industria cinematográfica y los ha conectado con una prenda de ropa.
Según el cartel de sala, este jersey azul marino de la derecha, corresponde a Jia Zhangke. Un jersey de lana con cremallera «tejido por su madre».
FIESTA FINAL
Y en el último día del festival, cuando se han entregado todos los premios grandes y casi ha quedado desierto el “palacio del cine» porque además, es lunes, tiene lugar la última gala, la que otorga los premios del jurado de la audiencia, los nuestros, y donde se despide a todos los voluntarios.
La gran fiesta comienza con el desfile por la alfombra roja, al final está Jia Zhangke que va recibiendo a todos los participantes y haciéndose la foto. Para mí es una sorpresa porque no tenía ni idea de qué iba a pasar. En el posado me toca junto a él.
En la entrega de premios, mis compañeros han decido que sea yo quien lea el premio en inglés, el premio del jurado en la sección Premier ha sido para la película italiana «Siempre nos quedará mañana» también de una directora, Paola Cortellesi.
Tras los premios y varias entrevistas y encuentros, empieza la fiesta. Comida, música y juegos.
Jia Zhangke vuelve a hacer su presencia participando en una rifa con los números de teléfono de todos los voluntarios. Previamente se han dado las gracias a todos los participantes en el evento, sin los voluntarios esto no sería posible. Desde la sombra, se hacen cargo de mucho de lo que acontece en el festival.
Jia Zhangke consciente de su popularidad es una figura muy presente que acude a todas las celebraciones, charlas, estrenos e incluso en las fiestas que tienen lugar durante los días que dura el festival de Pingyao, esto me parece muy importante.
Cuando acaba la rifa y abandona el salón, rodeado de «guardaespaldas», de otra manera no podría ni andar, me acerco a él con mi libro en mano. Él le indica a los hombres de negro que puedo pasar. Me firma el libro. No atina a escribir mi nombre, le digo que da igual, que ponga lo que quiera, no quiero robarle tiempo. La gente se empieza a agolpar a nuestro alrededor y más asistentes quieren que le firme de todo. Él me dice «tranquila», y yo me voy contenta a casa con mi firma de un libro que espero haber acabado de leer el año que viene.
Gracias Pingyao, nos vemos en 2025.