«MY LAND»  吾土 Wú tǔ (2015)

 

Director: Fan Jian

Productora: Zang Ni

Duración: 83 minutos

 

Chen Jun y su familia se trasladaron a Beijing hace quince años. En 2010, se ve obligado a dejar la tierra que alquiló para cultivar hortalizas por un proyecto inmobiliario. Sus vecinos optaron por irse por presión de los propietarios pero indemnizados. La familia Chen resiste como puede durante cinco años, una elección que cambiará sus vidas.

CRÍTICA

La verdad que este documental me dejó pegada al asiento del cine. Tuvimos la suerte de disfrutar de el, en el marco de la primera muestra de cine chino en Madrid, noviembre 2016.

Vi a mas de un espectador chino llorando al final de la proyección y es que no fué para menos. La lucha de una familia emigrada a Beijing para trabajar, sin residencia legal, que intenta no claudicar ante los mas grandes, por una presión inmobiliaria que les deja atados de pies y manos resistiendo y resistiendo hasta que la vida, sus hijas han crecido y tienen necesidades, no les permite aguantar mas.

Pero al mismo tiempo ,como expresaba el director en el coloquio final, la unión de esta familia, como se enfrentan a las dificultades de la vida como están juntos hasta el final.

Fan Jian y Versionchina
Fan Jian y Versionchina

No pude resistirme a preguntarle a Fan Jian, el director, como había encontrado esta historia, todo un regalo para cualquier documentalista, porque no es solo la historia de la recalificación de terrenos en Bejing y el poder del dinero, es que esta familia en verdad, desde los abuelos hasta los hijos, son tan íntegros, tan buena gente que acabas dudando de que aún exista alguien así. Fan Jian contaba que conoció a Chen, el padre protagonista, hacía ya 12 años, eran amigos, la historia comenzó, se empezó a grabar y aquí el resultado. De hecho muchas veces son los propios protagonistas los que, con la cámara que el director les había facilitado, graban los hechos.

Una narración en el tiempo, unos 5 años, con un montaje para mi casi perfecto, con muchísimo ritmo, que hace que la historia te deje anclada en la butaca.

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